El otro Doctor Shock

Habla sobre el inicio de la Escuela de Chicago, de la influencia carismática además de Friedman y de sus ideas radicales en torno a basicamente el mercado. Este sería capaz de regularse por sí mismo y que los problemas que puedan surgir están determinados por la intervención o contaminación que han hecho los políticos y esto sería lo que crea estas fluctuaciones.

Algunos de los impedimentos que tenía Fredman para implementar con todos sus discípulos y colegas sus ideas en Estados Unidos era las reticencias que aun quedaban por el crack de 1929 y la gran depresión que generaron la mayor crísis económica mundial, con cesantía, colas para acceder a alimento, suicidios, etc. Ideas además que estaban precedidas por el anuncio de John Maynard Keynes quien en un texto que se llama el fin del laissez faire, antes de la crisis había predicho el fin de la libertad del mercado para regularse a sí mismo. Posteriomente las ideas de Keynes son desarrolladas por John Kenneth Galbraith.

Del mismo que Keynes advirtió la posibilidad de la crisis, señala que en relación a Alemania, luego de la Segunda Guerra Mundial, tampoco se debería haber adoptado una posición laissez faire, señalando "la venganza me atrevo a predecir no tardará en llegar".

Lo que plantea Naomí Klein al respecto es que en ese momento el esfuerzo estaba centrado en que el Estado lograra que los ciudadanos tuvieran un mínimo de condiciones que les permitieran vivir con tranquilidad a fin de no sentirse seducidos con ideologías que se consideraban extremas como el fascismo y el comunismo.

Luego de la gran depresión en Estados Unidos, surge lo que se llama "capitalismo decente", con seguridad social en Estados Unidos, sanidad pública en Canadá, asistencia social en Gran Bretaña, protección al trabajador en Francia y Alemania, etc. En el resto del mundo, en particular en el que estaba en vías de desarrollo, se imponía una tendencia que se conoció como desarrollismo o nacionalismo del tercer mundo. En estos casos, el Estado tiene un rol protagónico para fomentar la industria al interior de los distintos países y por lo tanto disminuir el hecho de tener que recurrir a la exportación de recursos minerales cuyos precios, además, eran cada vez más bajos. Se reglamenta la nacionalización del petróleo, los recursos minerales de un país.

Hacia la década del 50 los desarrollistas, al igual que los keynesianos y social demócratas empezaron a obtener importantes logros. Dice Klein que el laboratorio más avanzado fue el cono sur de América Latina. Chile, Argentina, Uruguay y partes de Brasil. Estaba además la Comisión Latinoamericana para Naciones Unidas con sede en Santiago de Chile, dirigida por el economista Raul Prebisch durante el períodos de 1950 y 1963. En estos países entonces el Estado fomentaba e invertía grandes cantidades de inversión en obras públicas y subvenciones para el desarrollo de la industria nacional. Evitando además las importaciones agregando aranceles prohibitivos.

Una de estas consecuencias fue también la fundación de poderosos sindicatos que negociaron salarios de clase media. Sus hijos pudieron ir a las universidades y la distancia entre los más ricos y los más pobres disminuyó.

A fin de contrarrestar este movimiento, lo que plantea Friedman en su libro capitalismo y libertad, que además sería el programa económico del movimiento neoconservador en Estados Unidos. Por una parte el gobierno debe eliminar todas las reglamentaciones que dificulten la acumulación de beneficios. En segundo lugar debe vender todo activo para que sea operado por una empresa. Finalmente en tercer lugar debe cortar drásticamente los fondos asignados a programas sociales.

A diferencia de la expansión capitalista en la época colonial donde además se iban descubriendo nuevos territorios, lo que buscaba esta nueva guerra que había iniciado Friedman en contra del estado de bienestar o gran gobierno era subastar el Estado.

Entonces en la década del 50, específicamente el año 53 el presidente Dwight D. Eisenhower tenía sospechas que el desarrollismo que se había generado en algunos países pudiera vincularse más al comunismo. Por esta razón entonces, e influenciado por alguno de sus asesores entre ellos John Foster Dulles, su Secretario de Estado, inicia a través de la CIA, que a su vez estaba dirigida por su hermano Allan Foster Dulles, buscan entonces derrocar a aquellos países en los cuales el desarrollismo estuviera en plena implementación y auge a cambio de dictaduras. Esto con la idea de facilitar a las posibilidades de las industrias norteamericanas que pudieran ingresar a estos países.

Dos de los primeros complots que consiguieron éxito fue el derrocamiento en Irán de su presidente Mohammed Mosadegh por el brutal sha. El siguiente caso fue en 1954 cuando por petición explícita de la United Fruit Company fue derrocado en Guatemala el Presidente Jacobo Arbenz Guzman quien estaba expropiando las tierras que estaban inutilizadas para desarrollar un estado capitalista moderno y no una economía feudal.

Para erradicar el desarrollismo en el cono sur, se da una conversación que es fundamental el año 1953 entre Albion Patterson (Director de la Adminstración para la Cooperación Internacional en Chile, la cual posteriormente se denomina con la sigla USAID) y Theodore W. Schultz (Decano de la Escuela de Negocios de la Universidad de Chicago). Mantienen una conversación en la cual se revela la preocupación por la influencia de los economistas "rozas" de América Latina liderados por Raul Prebisch y plantean la necesidad que intelectualmente se influencie en mayor medida lo que está ocurriendo en el Cono Sur.

Para ello proponen que en Santiago se entrene a estudiantes en economía en la postura de la Universidad de Chicago. Se le ofrece esta opción al Rector de la Universidad de Chile, la universidad más importante del país, y el Rector rechaza la oferta porque era declaradamente ideológica e impedía que el claustro de académicos en Chile escogiera a los académicos que formarían a sus estudiantes. La propuesta si fue aceptada por el Rector de la Universidad Católica de Chile.

En un informe del año 1957 se plantea sin embargo que este programa no estaba teniendo los resultados que se esperaba porque estos líderes intelectuales no estaban influyendo sobre los asuntos económicos, no obstante que ya estaban estos mismos egresados, enseñando en Chile y también en Colombia. Por otra parte lo que estaba ocurriendo en el cono sur era más bien un giro sostenido hacia la izquierda, por una parte estaban los desarrollistas y luego en una posición más cercana los marxistas que defendían nacionalizaciones masivas y reformas agrarias radicales.

La situación se agudizó cuando Salvador Allende fue elegido Presidente en Chile en 1970. Nixon lanza su famosa orden a su director de la CIA Richard Helms que habiendo sido elegido Allende, hiciera chillar a la economía de Chile. Por su parte las empresas norteamericanas le declaran la guerra a Allende y el centro de actividades fue el comité ad-hoc de Chile en Washington liderada por la International Telephone and Telegraph Company y otras empresas principalmente mineras estadounidense, además de "Purina", "Bank of America" y "Pfizer Chemicals". Las actas de las reuniones de este comité ad-hoc planteaban que las empresas bloquearían los créditos estadounidenses a Chile, indiscretamente que hicieran lo mismo otros bancos norteamericanos, conferenciar con bancos extranjeros el mismo objetivo, evitar productos en Chile durante 6 meses, usar la reserva de cobre de Estados Unidos en vez de comprar a Chile, provocar una pescases de dólares, entre otras actividades.

El año 1973 se presenta al congreso norteamericano un informe al parlamento, el cual además estaba mayormente controlado por los demócratas en el cual queda claro la intención de la ITT desde un primer momento que Allende asumiera el gobierno y/o que siguiera en el poder.

Dos antecedentes facilitaron la marcha de las situaciones. Por una parte Brasil, había sido gobernada por una junta militar que primeramente había sido pacífica, pero en la medida en que la situación económica en el país empeoró, los ciudadanos comenzaron a manifestar su rechazo. El ejército cambia radicalmente y comienza a eliminar los restos de democracia recurriendo a la tortura sistemática. Logrando por tanto su cometido y continuar en el poder.

Por otra parte en Indonesia en el año 1965 se siguió una ruta distinta y más sanguinaria. El Presidente Sukarno que además era desarrollista, quería nacionalizar los recursos naturales y expulsar al Fondo Monetario Internacional y al Banco Mundial. Además no obstante que era un nacionalista trabajó muy unido al partido comunista. En el año 1965 surge entonces Suharto apoyado por la CIA, logra hacerse al poder y erradica a la izquierda. Se señala que las matanzas fueron al menos de medio millón de personas o incluso hasta un millón de personas masacradas a miles.

En el caso de Indonesia, al igual que como estaba ocurriendo en Chile, había un grupo de académicos de la Universidad de California en Berkeley, conocida como la "mafia de Berkeley" que fue la que preparó el plan económico. No eran tan radicales como lo era Friedman, pero abrieron las puertas a las multinacionales norteamericanas que comenzaron a explotar los recursos naturales que tenía este país.

En Chile los Chicago Boys tenían su zona cero en la Universidad Católica de Chile y la hacía denominar "clima de golpe". Por otra parte la Sociedad de Fomento Fabril, dirigida por Orlando Saenz y financiada por la CIA en un 75% desarrolló un plan de guerra que consistía por un lado en establecer relaciones con el Ejército de Chile y en otra diseñar programas de gobierno alternativo que se le presentarían a las Fuerzas Armadas.

Finalmente entonces se elabora un programa para la Junta que se conoció como el Ladrillo. Tenía más de 500 página y fue la guía inicial económica de la dictadura.

Por esto es que Orlando Letelier planteaba que lo que se dio en realidad el año 73 en Chile no fue solo un "golpe militar" dado que si bien actuó el Ejército también lo hicieron de manera determinante los economistas llamados Chicago Boys.

La receta fue entonces tres shock: el primer fue el golpe militar, el segundo el tratamiento de shock de Milton Friedman y el tercero el shock de Ewen Cameron.